"LA GENTE DEMANDA COCINAS NOBLES"

Michael J. Soltoff comercializa la marca eggersmann en el mercado estadounidense. Conoce a la perfección las necesidades de sus clientes americanos y sabe que destinan mucho espacio a sus cocinas. En esta entrevista nos habla de su amplia experiencia.

¿Cuáles son las preferencias de los americanos en cuanto a las cocinas?
La sociedad americana es extremadamente diversa y esto es algo que también se manifiesta en sus preferencias a la hora de elegir una cocina. Pero hay un nexo común: a todos les gustan las cocinas imponentes, y en sus casas las cocinas suelen ser muy espaciosas. Muchos siguen prefiriendo un estilo tradicional, pero especialmente nuestra clientela amante del lujo busca un diseño moderno, internacional y atemporal.

¿Cómo se percibe la marca eggersmann en un mercado como este?
Al público norteamericano le presentamos la firma eggersmann como una marca de cocinas que apuesta por líneas claras y un diseño moderno y que es sinónimo de gran competencia a la hora de ofrecer el máximo grado de personalización. Esto es precisamente lo que aprecian nuestros exigentes clientes.

«SI NO EXISTE, NOSOTROS LO REEQUIPAMOS»

¿Qué tendencias se aprecian actualmente en los EE. UU. en el mercado de las cocinas?
En general se valoran mucho las superficies resistentes y naturales. Por eso, el cliente aprecia mucho nuestra piedra natural. Al mismo tiempo se nota una tendencia clara por los tonos dorado y bronce, así como las puertas de cristal y las zonas de estantes abiertas. A la gente le gusta enseñar sus juegos de vajilla y cazuelas de alta calidad. No obstante, en nuestras planificaciones también juega un papel destacado la iluminación y otras tecnologías integrables en los sistemas de comunicación domésticos.

¿Y cuál es la petición especial más frecuente entre los clientes americanos?
Hay un dispositivo muy solicitado llamado «Lift-Shelf» que permite mover aparatos de cocina grandes y pesados desde el armario hasta la altura de la encimera. En Alemania no existe este tipo de mecanismos. Pero eso no es ningún problema, ya que reequipamos los armarios allí mismo con este sistema.

Michael J. Soltoff tiene 61 años y trabaja en la ciudad de Nueva York, donde se encuentra su oficina. Colabora desde hace 10 años con eggersmann como socio distribuidor.

LA OTRA DIMENSIÓN DE LA COCINA

Estamos dispuestos a recorrer nuevos caminos para satisfacer los deseos individuales de nuestros clientes. Por eso, hay mucho que mostrar y contar.